Esta madrugada (tarde de Japón), en la locación del Kashima Soccer Stadium, tuvo lugar el encuentro amistoso entre los conjuntos paraguayo y japonés, por la Kirin Challenge Cup.
Paraguay arrancó con Roberto Fernández, Juan Escobar, Fabián Balbuena, Gustavo Gómez, Iván Piris, Derlis González, Richard Sánchez, Rodrigo Rojas, Miguel Almirón, Tony Sanabria y Braian Samudio.
Una opaca selección paraguaya cayó 2-0 frente a los nipones y mostró muy poco a nivel futbolístico. La derrota en el amistoso internacional dejó al desnudo las falencias de un seleccionado albirrojo que está en pleno proceso de formación.
La propuesta local no tardó en surtir efecto ya que, con el balón y las opciones en su poder, volteó el marcador a su favor antes de la media hora de juego con los tantos de Osako (22’) y Minamino (29’).
La pobre exhibición paraguaya genera críticas y serias dudas sobre el proceso de Eduardo Berizzo, quien analizó la derrota de Paraguay ante Japón y reconoció que como equipo, la Albirroja, no funciona como él pretende.
“Fue un partido donde no pudimos equiparar el ritmo físico del rival, ellos con su velocidad generaron mucho peligro. Japón nos ganó de forma justa”, afirmó.
El estratega argentino sabe que “colectivamente” el equipo no funciona como se esperaba. “Nos costó encontrar la circulación de la pelota, no nos defendimos bien”, alegó.
La próxima cita será el 10 de septiembre en la ciudad de Aman, ante la selección de Jordania.