A fin de despejar las vías, la Policía Nacional utilizó carros hidrantes, gases lacrimógenos y balines de goma contra manifestantes que cerraron la ruta.
Gracias a la intervención de las fuerzas del orden, los cientos de vehículos que habían quedado estancados durante varias horas lograron circular con normalidad.
De esta forma los agentes ratifican las palabras de Euclides Acevedo, el nuevo ministro del Interior, quien aseguró que eso de cerrar de rutas no iba con él. Acevedo había expresado que protegerá las manifestaciones sociales, “pero nunca, nunca en detrimento del derecho de terceros”.
Uno de los incidentes ocurrió en las primeras horas del martes, un contingente de productores frutihortícolas venía realizando un bloqueo a la altura del kilómetro 150 de la Ruta 2, en la zona de Coronel Oviedo, departamento de Caaguazú.
Tras más de 8 horas de cierre y un fallido intento de diálogo, finalmente los efectivos de la Policía Nacional tuvieron que utilizar la fuerza para despejar la ruta y normalizar la circulación vehicular.
Un poco más temprano también se produjo otro despeje, en la zona de Pedro Juan Caballero, departamento de Amambay, donde un grupo de autodenominados “sintierras” bloqueó durante más de una hora la Ruta 5 como protesta ante un inminente desalojo.
Los manifestantes se encuentran ocupando un predio de aproximadamente 7 hectáreas que corresponde a un terreno municipal, el cual es reclamado por las autoridades locales. Los antimotines también recurrieron a la fuerza para dispersar a los manifestantes, que impedían el paso de los vehículos.