El Partido Democrático Progresista (PDP), junto con su aliado incondicional Frente Guasu (FG), ratifica su fuerte influencia en el gobierno de Mario Abdo Benítez, al ubicar en un cargo de gran importancia del Ministerio de Salud Pública a uno de sus “niños mimados”, quien había ocupado cargos en el gobierno de Fernando Lugo.
Se trata del doctor Juan Carlos Portillo Romero, quien asumió como viceministro de Atención Integral a la Salud, cargo recientemente creado por decreto del Ejecutivo.
El doctor Portillo ya se había desempeñado como director de Servicio de Emergencias Médicas Extrahospitalarias (SEME), que se benefició con las famosas asignaciones millonarias en la época de la ministra Esperanza Martínez, del Frente Guasu.
Ahora, con la nueva confomación del organigrama de Salud Pública, el viceministro de Atención Integral a la Salud pasará a llevar la admnistración de tan importante cartera sanitaria.
Es en atención a que manejará la Dirección General de Desarrollo de Servicios y Redes de Salud, la Dirección General de Gestión de Insumos Estratégicos en Salud, la Dirección General de Programas de Salud y el Instituto de Bienestar Social.
Por otra parte, atendiendo las denuncias de corrupción en el manejo del dinero destinado a la Ley de Emergecia, y en un intento de salvar el barco, el presidente Abdo Benítez puso al frente del control del uso de los recursos y las compras por el Covid-19, al ministro Antidrogas, Arnaldo Giuzzio, también un hombre muy allegado al PDP, que lideran Rafael Filizzola y su esposa, la senadora Desirée Masi. No obstante, Giuzzio es reconocido como uno de los más destacados ministros del gabinete de Abdo.
El equipo opositor dentro del Gobierno también está integrado por Carlos Ramón Alterburger Santander, viceministro de Seguridad Interna del Ministerio del Interior, recientemente nombrado. Además, Rafael Filizzola fue designado como asesor del MEC para el proceso de construcción del Plan Nacional de Transformación Educativa. El ministro Eduardo Petta “cobija” también al doctor José Casañas Levi.
Pero no hay que olvidar a los otros allegados al PDP, ocupando cargos importantes, como Carlos Arregui, quien ingresó al Ejecutivo como asesor de Transparencia e Integridad tras las denuncias periodísticas por supuestos hechos de corrupción en Petropar. De allí fue designado en la Secretaría de Prevención de Lavado de Dinero o Bienes (Seprelad) tras la renuncia de Epifania González.
En la nómina también figura el ex fiscal Emilio Fúster, quien se presentó por el movimiento Somos Paraguay para Asunción. Actualmente ocupa el cargo de coordindor de la Unidad Interinstitucional para la Prevención, el Combate y Represión del Contrabando (UIC).
Fuente: La Nación