La Ordenanza 26/92, de “Servicio de transporte de personas en automóviles de alquiler”, prohibe rotundamente el alquiler o venta de paradas, pero todos los conductores de la parada 41, en San Martín y Bruselas, alquilan el espacio a los permisionarios.
Éstos hacen firmar contratos por escribanía a los denominados “inquilinos” por Gs. 1 millón semanal en promedio. Los inquilinos vuelven a subcontratar a choferes a quienes les cobra por día. La triangulación, entre dueño de parada, inquilino y chofer mueve millones en negro en las distintas paradas de la capital, denunciaron los taxistas, que son los últimos en este engranaje.
Un solo titular de parada puede tener varias concesiones. Como ejemplo trascendió el caso de Arnulfo Romero, que tiene 11 espacios en 3 paradas distintas; 5 en la parada 41, otras 5 en la parada 50 (Autopista esq. Molas López), y además 1 en la parada 25 (Hospital Central de IPS).
Romero alquila cada uno de sus 11 espacios a Gs. 1 millón por semana en promedio, teniendo un ingreso aproximado de Gs. 11 millones semanales.
Este es un solo caso que se conoce luego de que taxistas de la parada 41 reclamaran mejores condiciones laborales y seguro social, tal como lo establece obligatoriamente la Ordenanza 26/92 para los permisionarios, en este caso para Romero.
En la mañana de ayer la Dirección de Tránsito de la Comuna asuncena intervino la parada 41 luego de varios días de denuncias por parte de los taxistas.
Luis María Pereira, director de la mencionada dependencia comunal, señaló que verificaron la habilitación de los 14 rodados que estaban en el sitio, y que solo uno no contaba con sus documentos en regla. Esa fue la única verificación que hicieron en la intervención.
Consultado sobre la denuncia de informalidad laboral realizada por los choferes, alegó que el control de la relación de trabajo que tienen los conductores con los propietarios “escapa de la función de la Municipalidad”, ignorando el Art. 19 de la Ordenanza 26/92.