Las recientes lluvias en territorio brasileño ayudaron a elevar temporalmente el nivel del río Paraná, hecho que mantiene expectante a los exportadores de soja que todavía necesitan enviar por esa hidrovía 600.000 toneladas de granos.
El director ejecutivo de la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas, Hugo Pastore, comentó que el comportamiento climático en el vecino país ayudó a formar una ventana de agua natural que posiblemente permitirá el ingreso de más remolcadores a los puertos del sur del país.
Esta condición se mantendría aproximadamente hasta el 10 de setiembre y es probable que no se necesite de las maniobras de las hidroeléctricas Itaipú y Yacyretá para facilitar la navegación de los barcos.
Pastore indicó que al menos una barcaza se cargó y otra se prepara para el mismo operativo, pero recién hoy las autoridades podrán garantizar la continuidad de la navegación para que más remolcadores primeramente trasladen los contenedores hasta los puertos y de allí hasta su destino.
Este año se realizaron dos históricos operativos en conjunto con las binacionales y la Cancillería Nacional para crear ventanas de agua que permitieron el transporte de más de 300.000 toneladas de soja que se producen principalmente en los departamentos de Misiones, Ñeembucú e Itapúa.
La intención es contribuir a la dinamización de la economía afectada por la pandemia y por el estiaje de los ríos que posibilitan las exportaciones.